Cocodrilos, de Magali Velasco Vargas

 


Hace algunas semanas recibí un ejemplar de Cocodrilos, la más reciente novela de la escritora veracruzana Magali Velasco Vargas. Agradezco profundamente que me lo haya hecho llegar, acompañado de una dedicatoria entrañable. Me adentré en sus páginas sabiendo que no sería una lectura fácil, y no lo fue. Es una historia cruda, atravesada por las violencias que azotan al estado de Veracruz: el crimen organizado, las desapariciones forzadas, la corrupción, y sobre todo, el altísimo riesgo que implica ejercer el periodismo en estos contextos.

Cocodrilos recibió una mención honorífica en el 4º Concurso Iberoamericano de Novela Ventosa-Arrufat y Fundación Elena Poniatowska Amor, A.C. y está dividida en seis partes y diecinueve capítulos que nos van sumergiendo en un relato profundamente humano, donde la línea entre la ficción y la realidad se vuelve cada vez más delgada.

El protagonista es Santiago Becerril, un fotoperiodista que se enfrenta a la sospechosa muerte de su colega y guía profesional, Amanda González Quiñones. Amanda, al parecer, investigó más de lo que debía y en donde no debía. En su intento por encontrar la verdad, Santiago no solo se topa con los peligros inherentes a su oficio, sino también con sus propios fantasmas: una madre enferma, una expareja que aún pesa, y la herida abierta de una infancia marcada por la separación de sus padres. La novela, narrada con precisión atmosférica, nos hace sentir el calor, el sudor, los insectos; todo aquello que define a Veracruz, y que también lo vuelve un escenario cargado de tensiones.

Cocodrilos no es una novela para pieles sensibles. Con sus 211 páginas, pone sobre la mesa lo que implica vivir con el dolor de no saber dónde está un hijo, una hija, un ser querido. Nos confronta con el miedo de encontrarlo —o no— en una fosa. Y también con la rabia que mueve a quienes buscan sin descanso, especialmente a las madres, que aquí aparecen como figuras de una valentía desgarradora.

Aunque se trata de una obra de ficción, basta con abrir cualquier periódico del país para reconocer la cercanía brutal de esta historia con la realidad. Por eso duele, por eso importa. Porque refleja sin tapujos lo que muchos viven en silencio.

Además, Cocodrilos ha dado el salto al cine. Magali adaptó su novela en un guión cinematográfico junto con su hermano, el director mexicano J. Xavier Velasco. La película, basada en el libro, se estrenará este 11 de junio. Esta colaboración entre hermanos promete llevar a la pantalla grande la misma intensidad que se respira en el papel.

 


Comentarios

Magali Velasco dijo…
Agradezco la sensibles lectura, compartir desde la empatía, me emociona que esta historia haya llegado a tu alma. Un abrazo grande.




E

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