Lo que sabe la señorita Kim, de Cho Nam-joo
Recientemente terminé el libro “Lo que sabe la señorita Kim” de la autora coreana Cho Nam-joo (Seúl, 1978) una antología de relatos publicada en español este año bajo el sello de Alfaguara (Penguin Random House).
Este libro de 227 páginas reúne ocho cuentos cuyas protagonistas son mujeres coreanas con edades y circunstancias diferentes, cada una viviendo una etapa distinta de la vida, pero con las que fácilmente podemos identificarnos.
“Lo que sabe la señorita Kim” presenta desde la reflexión sobre la edad madura, el amor por la lectura y el cierre de la vida en Bajo el ciruelo, hasta el enamoramiento infantil y la pandemia por Covid en Primer amor, 2020.
Temas preocupantes como el machismo, la falta de reconocimiento en el trabajo o las relaciones tóxicas son algunos de los que plantea este libro, pero también otros esperanzadores como la posibilidad de cumplir los sueños sin importar la edad, una bella reflexión que deja el cuento Noche de aurora boreal.
El cuarto relato que le da título al libro y que fue el primero que se publicó, hace alusión a que el apellido Kim es uno de los más usuales en Corea y en que cualquiera puede ser la señorita Kim, mujeres que podemos darlo todo en el entorno laboral pero que no se nota nuestra presencia hasta que ya no estamos; este relato es contado por una mujer que toma el puesto de la Señorita Kim en una oficina y es testigo del caos que se sucede ante su ausencia.
El cuento que lleva por título Ausente - y que la autora empezó a escribir en el 2020 - plantea la partida intempestiva y por decisión propia de un padre y esposo en edad avanzada, cuyo único rastro de su nueva y misteriosa vida son los pagos que con una tarjeta realiza.
El tema del acoso sexual y el impacto de las redes sociales en la adolescencia también está presente en el cuento Y la niña creció, un texto que la autora construyó a partir de una investigación sobre mujeres que viven diversos tipos de violencia.
“Lo que sabe la señorita Kim” es una compilación interesante y fresca de relatos feministas en donde también la comida es un elemento que siempre aparece dando cuenta de su relevancia en la cultura coreana.
No es usual que yo lea antologías sin embargo fue un texto que resultó
interesante y agradable de leer. Lo recomiendo
Comentarios